Pero que me está pasando con el dulce?
Tarta helada con crujiente de manzanas y mousse de chocolate blanco con limón
Masa batida:
4 huevos (2 enteros + 2 yemas + 2 claras)
80 + 20g de azúcar
55g de harina
Almíbar para empapar la masa:
100g azúcar
100 mL agua
licor de manzana
Lámina de manzana gelatinizada:
120g azúcar
300 mL agua
2 limones
4 manzanas ácidas
4 hojas de gelatina
Mousse de chocolate y limón:
110 + 300 mL de nata (muy fría sobre todo los 300)
120g de chocolate blanco
2 hojas de gelatina
2 limones
Masa batida:
En un bowl, batir conjuntamente los 2 huevos enteros junto con las 2 otras yemas y los 80g de azúcar. Colocar sobre un cazo en el fuego con agua hirviendo para que se caliente con el vapor hasta unos 40º. Yo sin termómetro ni nada que se le pareciera lo hice a ojímetro y la verdad es que es perfectamente visible como la mezcla va alcanzando la temperatura, el conjunto blanquea y el volumen aumenta. Se retira entonces del fuego y se sigue batiendo unos minutos más hasta que quede bien espesa y se pueda dibujar un ocho con la crema que cae de las varillas y aguante un poco antes de desaparecer. El truco es hacerlo a mano e inclinar las varillas intentando que entre el máximo de aire posible, ya que las batedoras eléctricas al funcionar verticales no van tan bien. Al final voy a triunfar con el método artesanal!
Precalentar el horno a 210º.
Incorporar lentamente la harina mezclando con espátula de goma. Montar las claras a punto de nieve. Cuando empiezen a espumar, incorporar el azúcar restante sin que queden demasiado rígido. Incorporar un poco de la mezcla anterior para que se vayan soltando las claras y posteriormente, vertir el resto y mezclar de abajo a arriba con la espátula de goma.
Verter en el molde plano, esparcir uniformemente con la espátula (intentar que quede finita la capa ok?) y poner al horno 10 min. Desmoldar y dejar enfriar.
Almíbar:
Mezclar el azúcar y el agua y llevar a ebullición. Cuando se enfrie, incorporar el licor de manzana.
Lámina de manzana:
Hervir el agua con el azúcar y dejar enfriar. Hidratar la gelatina durante 20 min con agua fría e incorporar al almíbar antes de que se enfrie del todo.
Colocar los daditos en un molde plano y verter el almíbar. Dejar en la nevera para que la gelatina solidifique.
El poema de la mousse:
Hidratar la gelatina con agua fría durante 10 min.
Llevar a ebullición los 110 mL de nata y luego verter sobre el chocolate blanco, poco a poco, mientras se va mezclando con al espátula. Escorrer la gelatina e incorporar a la mezcla. Incorporar el zumo de los limones.
Montar el resto de la nata y en cuanto la mezcla anterior esté fría mezclar con espátula de goma de abafo arriba sin aplastar.
La ídea es hacer capas consecutivas:
1- 1/2 capa de masa mojada en el almíbar
2- 1/2 lámina de manzanba en gelatina
3- la mitad de la mousse
4- 1/2 capa de masa mojada en el almíbar
5- 1/2 lámina de manzanba en gelatina
6- la mitad de la mousse
7- Espolvorear con la ralladura de un limón
A pesar de mi falta de medios y de la apariencia un tanto rústica, esta tarta estaba de miedo. Es ligera y fresca, me encanta. Además, se me han ocurrido un montón de combinaciones, unas ligeritas y otras no tanto, como: piña los trocitos, coco para la mousse y pistachos en la masa; chocolate negro para la mousse, trocitos de frutos rojos, más choco en la masa... Ultimamente, y sinceramente por primera vez, el dulce despierta mi imaginación...







10 langostinos
Repitieron! Les gustó y era mi primera vez! El faenón fue sustancial pero la recompensa también. Vosotros teníais pistas, sabíais que había preparado fumet y que me lanzaba de lleno en la cocina del mar. Me gusta la cocina moderna pero con background de cocina tradicional y reconozco que existen platos intemporales, que no dejan nunca de estar de moda, porque el concepto de base és excepcional y saben conjugar a la perfección el equilibrio de los sabores y huyen de la pesadez en todos los aspectos. Este es el caso de la fideuá, un clásico para siempre en primer plano.
150g fideos nº0
Esta receta es mi interpretación personal de algunas recetas del libro "La cuina de l'Isma" y espero que, para los que os lancéis, tengáis el mismo éxito que yo y la disfrutéis en buena compañía. Una receta para compartir que es pues una mía pequeña contribución a la felicidad de los que me rodean y espero también a la vuestra.





